El viernes por la noche Golden State Warriors vencieron 144-113 a San Antonio Spurs, en un partido en el se rompió la marca de asistencia en temporada regular en la historia de la NBA, al que asistieron 68 mil 323, que colmaron el Alamodome de San Antonio.
David Robinson, leyenda de los Spurs, anunció la nueva marca de asistencia, en un partido donde hubo poco que celebrar, pues fuera de los 21 puntos de Tre Jones, el equipo cayó sin dar oposición, siendo superado en todos los cuartos por los Warriors, liderados por Jordan Poole y Donte DiVincenzo, que viniendo de la banca anotaron 27 y 22 puntos, respectivamente.
Con esta victoria los Warriors mejoran a marca de 21-21, colocándose en el octavo lugar de la Conferencia Oeste, accediendo de momento al torneo play in, y recuperando de a poco el ritmo tras un inicio dubitativo con apenas 4 triunfos fuera de casa, contraste con sus 17 victorias en Chase Center, por lo que en relación de victorias y derrotas los Warriors son el mejor local pero el peor visitante.
Los Spurs, por su parte, que regularmente juegan en el AT&T Center, con capacidad para poco más de 18 mil fanáticos, jugaron anoche en el Alamodome, al ser una ocasión especial por recibir al actual campeón, y para levantar un poco a la afición que ha visto una dura temporada, con marca de 13-30, penúltima registro en el Oeste y actualmente en el puesto 27 de la NBA, por lo que si hoy acabara la temporada estarían en posición de lotería por la primera selección global del Draft 2023, donde el favorito a ser seleccionado es el prospecto francés de 19 años Victor Wembanyama.
Los 68,323 asistentes superan el anterior récord en un partido de temporada regular de NBA, superando los 62,046 del Chicago Bulls-Atlanta Hawks realizado el 27 de marzo de 1998 en el Georgia Dome.
También supera los 39, 554 del Spurs vs New York Knicks del 18 de junio de 1999, el juego 2 de las Finales NBA de 1999 como el partido con más asistencia en la franquicia texana, el partido y la serie se lo acabaron llevando los Spurs para obtener su primer campeonato en su historia.
El récord Guiness al partido de baloncesto con mayor asistencia son los 108,730 del Partido de Estrellas de 2010, jugado el 2 de febrero de dicho año, también en Texas, pero en el Cowboys Stadium, en ese momento recién inaugurado, de los Dallas Cowboys de la NFL.
