
Sergio Checo Pérez brilló este domingo y ganó el Gran Premio de Singapur. El mexicano ha sumado su cuarto triunfo en la dura Fórmula 1 tras superar una carrera de supervivencia en el circuito asiático.
El de Red Bull logró mantener a raya a Charles Leclerc para quedarse con el triunfo en una accidentada carrera con seis pilotos fuera de combate.
El desempeño del azteca pudo más con más de siete segundos y medio de distancia de su rival. El podio lo completó Carlos Sainz.
“Las últimas tres vueltas fueron muy intensas, empujé todo para ganar”, dijo el mexicano. “¡Esta es la forma mexicana [de ganar]!”, agregó Checo.
El piloto mexicano tuvo una estupenda clasificación al colocarse segundo, 22 milésimas de segundo detrás de Leclerc.
Los circuitos callejeros, como el de Mónaco, Azerbaiyán y este de Singapur, le han sentado bien, aunque este domingo todo aumentaba la dificultad con un circuito sinuoso.
La carrera sufrió un retraso de una hora debido a la lluvia que dejó mojada la pista. Pérez arrancó más despierto que nunca para ganarle la posición al Ferrari y ponerse líder.
Por su parte, Verstappen, que inició octavo, cayó hasta la undécima posición. Cerca de la octava vuelta, un choque entre los autos de Zhou y Latifi provocó un safety car. Y sí: volvía el momento de tensión. Ya en esta temporada el mexicano había perdido el podio por una distracción a la hora de reiniciar la carrera, pero este domingo no.
Checo Pérez apretó a fondo el acelerador para no perder la distancia con Leclerc.