Los Indiana Pacers, de la mano de una actuación histórica de Tyrese Haliburton, venció 130-121 a los New York Knicks, en el Juego 4 de las Finales de la Conferencia Este, poniendo el 3-1 en la serie, para colocarse a un triunfo de su primeras Finales desde el 2000.
Haliburton anotó 11 de sus 23 disparos de campo, 5 de 12 desde el triple y metió de sus 7 tiros libres, totalizando 32 puntos, 12 rebotes y 15 asistencias, sin pérdidas de balón, convirtiéndose en el primer jugador en la historia de la postemporada con un partido anotando al menos 30 tantos, 10 rebotes, 15 asistencias y 0 pérdidas de balón, además de 4 robos de balón en 38 minutos en pista.
Acompañando al base, estuvo Pascal Siakam con 30 puntos y Bennedict Mathurin, que en 12 minutos en cancha aportó con 20 unidades viniendo de la banca (sumaba 15 puntos en total el resto de la serie) y los Pacers quedan a ley de una victoria para clasificar a sus primera Finales de la NBA en 25 años.
Los Knicks dieron pelea a pesar de estar fuera de casa, liderados por 31 puntos de Jalen Bruson, Karl-Anthony Towns anotó 24 puntos y 12 rebotes pero sufrió un duro golpe en la rodilla y debió salir del encuentro, quedando en duda su participación para el Juego 5, que se disputará el jueves en el Madison Square Garden de Nueva York; apenas 13 han remontado una desventaja de 3-1, apenas el 5% de los equipos que han caído en este déficit.
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