El Real Madrid cayó derrotado este miércoles contra el Athletic Club de Bilbao (2-1) en un partido espectacular que tuvo de todo y en el que Kylian Mbappé volvió a fallar un penalti, después de su comentado error contra el Liverpool en la Champions. Con esta derrota, el Barça vuelve a escaparse en la clasificación, con 4 puntos de ventaja, aunque el Madrid tiene pendiente el partido contra el Valencia.
La principal novedad que presentó Carlo Ancelotti en su alineación fue la presencia de Tchouaméni, ya recuperado de su lesión, para reforzar el centro del campo. El sacrificado fue Brahim Díaz, que se ha quedado en el banquillo.
El resto del equipo fue el mismo que derrotó al Getafe en la última jornada, con Lucas Vázquez, Asencio, Rüdiger y Fran García en la defensa; Tchouaméni, Ceballos, Fede Valverde y Bellingham en el centro del campo; y Rodrygo y Mbappé como jugadores más adelantados.
El Athletic Club empezó el partido imponiendo un ritmo eléctrico, frenético, muy vertical, con los hermanos Williams como principales peligros. En el minuto 3 ya ha tenido que aparecer Courtois, para desviar un centro raso de Nico para Iñaki. El acoso de los leones ha durado hasta el minuto 14, cuando todo San Mamés se llevó un enorme susto. Mbappé marcó el 0-1 y el juego se paró durante 2 minutos. Primero, para comprobar si era fuera de juego, ya que el balón venía rebotado. Y después, por un posible penalti sobre Rodrygo, justo en la acción previa. Finalmente, Sánchez Martínez no consideró la apreciación del VAR y ha decretado que era fuera de juego y que no había penalti.