El quarterback Justin Herbert, de Los Angeles Chargers, se perderá el resto de la temporada debido a una fractura en el dedo índice de su mano derecha que requerirá cirugía, informó Ian Rappoport de NFL Network, siendo la nueva víctima de las lesiones que han marginado a diversos quarterbacks estelares este año, como: Aaron Rodgers, Deshaun Watson, Joe Burrow y Kirk Cousins.
Herbert sufrió la lesión el domingo en la derrota 21-7 ante Denver Broncos, al ser golpeado en el segundo cuarto por el ala defensiva Zach Allen, tras levantarse se notó que le molestaba su mano derecha, siendo evaluado en el vestidor y declarado que no volvería al partido, del que se despidió con 9 pases completos de 17 lanzados para 96 yardas y 1 intercepción.
El lunes se dio a conocer el alcance de la lesión aunque el equipo tenía la esperanza de que Herbert volviera antes del cierre de temporada, pero por la gravedad de la lesión y su marca de apenas 5-8, dos juegos detrás del último puesto comodín a falta de 4 juegos por disputar, por lo que parece remota posibilidad de acceder a postemporada, por lo que finalmente el jugador regresará para 2024.
En la temporada baja Herbert renovó con el equipo por 5 años y 262.5 millones de dólares, el segundo contrato más lucrativo en la historia del deporte, pero esta campaña ha sido de inmensa frustración, limitado por una fractura en un dedo de su mano izquierda por varias semanas, y se despide de 2023 con 3134 yardas por aire, 20 pases de anotación y 7 intercepciones, 297 pases completos de 456 lanzados, para 65.1%, el más bajo en su carrera.
Easton Stick, quien suplió el domingo a Herbert, será el quarterback titular el jueves ante Las Vegas Raiders, en el que será su primer inicio en su carrera, el novato Max Duggan será el suplente, anunció el coach del equipo, Brandon Staley.
