Fred McGriff y Scott Rolen ingresaron al Hall de la Fama de Cooperstown.
Fred McGriff y Scott Rolen fueron los principales protagonistas en el recinto de honor de la pelota en las Grandes Ligas, al ser inducidos al Salón de la Fama de Cooperstown, Nueva York, cuya ceremonia se llevó este domingo en Estados Unidos.
McGriff fue electo en diciembre de forma unánime por el Comité de Veteranos, logrando los 16 votos, único en obtener el mínimo requerido (12 votos) para ser enaltecido al templo de los inmortales en Cooperstown, en su carrera de 19 temporadas, donde jugó para los Azulejos de Toronto, Padres de San Diego, Bravos de Atlanta (su paso más destacado), Devil Rays de Tampa Bay, Cachorros de Chicago y Dodgers de Los Ángeles.
McGriff bateó 493 cuadrangulares, empujó 1550 carreras, anotó otras 1349, conectó 2490 imparables, dejando un promedio de .284 y su OPS+ fue de 134 (el promedio de la liga es de 100), participó en 5 Juegos de Estrellas (Más Valioso en la edición de , ganó 3 Bates de Plata, fue campeón de Serie Mundial en 1995 y es 1 de 2 jugadores en conectar al menos 30 jonrones en una campaña con 5 equipos distintos (Gary Sheffield).
“Ha sido un largo camino, con mucho trabajo invertido y miles de horas tratando de mejorar.. Pero como les digo a todos, una computadora no puede medir el corazón de la persona. Siempre tuve mucho corazón”.
“Mi meta era simplemente llegar a Grandes Ligas. Pero ahora he superado toda expectativa que pude haber imaginado… y un poco más. Es una gran sensación ser reconocido por tu trabajo duro. Y ahora, tener una placa por siempre en el Salón de la Fama es increíble…Estar en este podio, rodeado de este grupo, valida mi carrera. No hay nada mejor”, dijo McGriff, de 59 años, en su discurso.
Mientras que Rollen, de 48 años, fue elegido en enero por la Asociación de Cronistas de América (BBWAA por sus siglas en inglés), con un 76.3% de votos, superando en requerido 75%.
Tuvo una carrera destacada de 17 años, fue uno de los mejores tercera base de su generación, con 2077 imparables, 512 dobles, 316 jonrones, 1287 carreras empujadas, 1211 anotadas, promedio vitalicio de .281, OPS de .855 (OPS+ de 122), 7 Juegos de Estrellas, Novato del Año en 1997, 1 Bate de Plata, un anillo de Serie Mundial en 2006 y en la defensa, ganó 8 Guantes de Oro. Vistió las camisetas de Filis de Filadelfia, Cardenales de San Luis, Azulejos de Toronto y Rojos de Cincinnati.
“Jugué lo más duro que pude y puse el mayor esfuerzo posible…Para mí, es muy intimidante estar en el mismo lugar que esos hombres (en el Salón) y sus familias. Ellos son las leyendas del juego”, indicó Rolen, además de compartir una historia sobre cómo su padre le enseñó el valor del trabajo arduo y maximizar sus capacidades.
John Lowe y Pat Hughes también fueron inducidos, como recipientes del Premio Ford C. Frick a la Excelencia, dado por la BBWAA, para honrar su carreras. Lowe cubrió por 29 temporadas a los Tigres de Detroit, de 1986 hasta su retirada en 2014, y Hughes es el narrador jugada por jugada de los partidos de los Cachorros de Chicago desde 1996 y su carrera en los medios inició en 1978, sigue en los mismos hasta el día de hoy.
