
Alemania se impuso este viernes a Luxemburgo por 4-0 en un partido de la fase de clasificación para el Mundial 2026 jugado en PreZero Arena de Sinsheim en el que en ningún momento se tuvo la sensación de que pudiera tener un desarrollo distinto.
El equipo teutón se fue en ventaja pronto, en el minuto 12, con un gran gol de falta de David Raum que pasó el balón por encima de la barrera luxemburguesa.
Los germanos habían ejercido presión desde el principio y metido a Luxemburgo en el área. En el minuto 4 un remate de Serge Gnabry terminó en la red, pero la pelota había pegado en el brazo de Nick Woltemade, por lo que el gol fue invalidado.
Sin embargo, nada indicaba que a Alemania pudiera complicársele un partido que, pese a que tenía en frente a un rival que sobre el papel podía considerarse débil, se tomaba con total seriedad ante todo en la disciplina colectiva en la recuperación de pelota.
Si había alguna duda, éstas quedaron dispadas en el minuto 21, cuando el árbitro Nenad Minakovic, tras consultar las imágenes del VAR, sancionó penalti y expulsó a Corac por mano intencionada dentro del área. Joshua Kimmich asumió el cobro y marcó y Luxemburgo quedó 2-0 por debajo en el marcador y con un hombre menos ante lo que le quedaban pocas razones que alimentaran la esperanza de dar una sorpresa.
Aunque los luxemburgueses lograron llevar el 2-0 al descanso, en el segundo tiempo Alemania puso rápidamente tierra de por medio. En el 47 Gnabry marcó, a pase de Karim Adeyemi, con un remate dentro del área y en el 51 Kimmich definió desde corta distancia tras varios rebotes en un saque de esquina.
El partido era una constante presión alemana al área de un Luxemburgo completamente replegado, Hubieran podido caer más goles. Jonathan Burkardt, tras entrar por Woltemade, tuvo dos buenas ocasiones. Pero al final el marcador se quedó en un 4-0 luego de un encuientro en el que prácticamente sólo hubo un equipo en el campo.