Liam Coen será el nuevo entrenador de los Jacksonville Jaguars, así lo anunció este viernes el equipo en sus redes sociales, finalizando un proceso lleno de polémica, tanto para la organización como para Coen y su exequipo, Tampa Bay Buccaneers, de quien fue coordinador ofensivo en el año 2024.
Los Jaguars tuvieron un caótica proceso en los últimos meses, tras la salida del entrenador Doug Pederson, pues retuvieron al gerente general Trent Baalke, lo que ahuyentó a distintos candidatos a suplir la vacante de entrenador, entre ellos el propio Coen, que acordó en días pasados renovar con los Bucs, sin embargo, después del despido de Baalke el miércoles.
Coen dio marcha atrás y negoció sin consultar con Tampa, y el jueves se conoció que se reunió con el equipo de Jacksonville y le comunicó a Buccaneers su decisión de dejar la franquicia y tomar la oferta de Jaguars.

Al mando de Coen, la ofensiva de Buccaneers en 2024 fue la cuarta mejor en puntos con 29.5 en promedio por juego, tercero en yardas totales (399.6 por partido) y en yardas terrestres (149.2), y cuarto en yardas por pase (250.4), con el descubrimiento del novato corredor Bucky Irving y con el quarterback Baker Mayfield teniendo la mejor temporada de su carrera, dando la ofensiva un salto cuántico en comparación a 2023, cuando fueron la peor ofensiva por tierra y ocuparon el puesto 23 en ofensiva total.

Por el contrario la campaña pasada los Jaguars apenas promediaron 18.8 puntos anotados, la ofensiva 26 en la liga, y quedaron en el tercio inferior también en yardas aéreas y terrestres por partido, con un llamado de jugadas predecible y sin muchas variantes al mando de Press Taylor, cosa que provocó el enfado de la fanaticada, y no ayudó las lesiones del quarterback Trevor Lawrence, quien apenas disputó 10 juegos, con 11 pases de anotación y 7 intercepciones, y en sus 4 temporadas al frente del equipo, pese a su talento, no ha podido mostrar el potencial que se dijo que tenía previo a su llegada a la liga.
La misión de Coen será el rescatar la carrera de Lawrence, además de arreglar una ofensiva inconsistente, con nulo ataque terrestre, aprovechar al receptor Brian Thomas Jr., que fue el único punto alto la campaña pasada en su año de novato, y cambiar una cultura bastante mediocre alrededor de la franquicia, que se constató justamente en este proceso de búsqueda de entrenador.

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