Los Denver Broncos sacaron un agónico triunfo de visita 24-22 ante Buffalo Bills, en el duelo del Monday Night Football, que cerró la Semana 10 de la NFL.
Pero como no podía ser de otra manera, se decidió con un gol de campo en la última jugada (sexta vez esta semana, mayor en la historia por una misma jornada), y levantaron vuelo a costa de los Bills que pagaron caro todos sus errores y cayeron de forma desgarradora en su propia casa.

El partido empezó cuesta arriba para Bills, ya que en la primera jugada James Cook cometió un balón suelto, y los Broncos capitalizaron con un gol de campo de Wil Lutz para abrir el marcador.

En la siguiente serie Josh Allen movió el balón hasta el territorio de Broncos, pero cerca de zona roja envió un pase a Gabriel Davis, pase que le rebotó en las manos y le cayó al safety Justin Simmons para una dolorosa intercepción.

Ambos equipos se estancaron en ofensivas, pero en el segundo cuarto Russell Wilson entró en ritmo y llegó a la yarda 7 de Bills, en cuarta oportunidad, se la jugó y acabó conectando con Coutrland Sutton para un pase de anotación espectacular.
Lutz falló el punto extra y el marcador se puso 9-0.
Allen se sacudió el golpe con su mejor serie ofensiva, que cerró con un pase de anotación a Dalton Kincaid y una conversión de 2 puntos para ponerse 9-8.
Wilson y su ataque terrestre avanzaron hasta territorio rival, pero la defensa de Bills los detuvo y los forzó a conformarse con un gol de campo, todo para devolverle el balón a Allen a falta de 40 segundos para el final de segundo cuarto. Pero en la primera jugada de esa última serie, Allen lanzó una intercepción a manos de Fabian Moraeu, capitalizando Broncos en otro gol de campo de Lutz para irse en ventaja al descanso 15-8.
La defensa de los Bills levantó la mano una vez más en el tercer cuarto cuando Taron Johnson le zafó el balón a Sutton, y esta vez Allen no perdonó, con una gran serie, apoyado en su ataque terrestre y que finalizó con un acarreo anotador de Latavius Murray para poner el partido empate a 15 en el tercer cuarto.
Sin embargo, la inercia del ataque se cayó en la siguiente serie, cuando Allen dejó caer el balón al intentar dárselo a Cook, para la cuarta pérdida de balón de la noche.
Wilson siguió eficiente y en el último cuarto y finalizó una gran serie con un pase de anotación a Javonte Williams, aunque una vez más no pudieron concretar el punto extra, tomaron ventaja 21-15 a falta de 5 minutos.
En respuesta Cook corrió casi toda la cancha con 5 acarreos, y Allen, también por tierra, remató con una anotación de 5 yardas para que Bills recuperaran ventaja, 22-21 con menos de 2 minutos por jugar.
Con la necesidad de al menos un gol de campo, Wilson avanzó hasta más allá de medio campo, hasta que una captura de A.J. Epenesa colocó en predicamento a los visitantes, con una tercera oportunidad y 10 yardas por avanzar, ante la presión Wilson flotó un pase que no pudo completar con Jerry Jeudy, pero fue por una interferencia defensiva de Johnson que pasó de héroe a villano, dandole distancia de gol de campo, pero por el uso de los tiempos fuera de Sean McDermott, coach de Bills, obligó a que Lutz optara por el gol de campo de 41 yardas a las carreras sin tiempos fuera, pateandolo desviado a falta de 4 segundos, pero una vez más otro error de Bills le dio vida a Broncos, al alinear 12 jugadores en la crucial acción, siendo penalizados con 5 yardas de castigo y dándole una última oportunidad a Lutz, que ahora con el intento de 36 yardas y reloj detenido no perdonó, anotando el gol de campo para poner el 24-22 final.
Con la victoria los Broncos rompen una racha de 7 derrotas seguidas en Lunes por la Noche, y mejoran su marca en la temporada a 4-5, hilando 3 triunfos seguidos.
Wilson fue la figura de la noche con 24 pases completos de 29 lanzados, para 192 yardas y 2 anotaciones, sin pérdidas de balón, consolidando esta nueva versión más conservadora y cuidando el balón, pues en esta racha de 3 triunfos del equipo, no ha lanzado intercepciones; su defensa le complementó con 4 robos de balón, sumando 9 recuperaciones en los últimos 2 partidos.
Por su parte, los Bills dejan su marca en 5-5, complicando sus aspiraciones a postemporada, a 2 juegos de Miami Dolphins por la división y con el apretado calendario que les resta, pone las cosas cuesta arriba, pagando caros su errores, con 4 entregas de balón, 5 castigos que le costaron 63 yardas (Broncos fue penalizado en 10 ocasiones, pero solo para 61 yardas), incluyendo los últimos 2 muy costosos.
El equipo corrió para 192 yardas, lo más alto de la temporada, y 2 anotaciones, y la defensa logró capturar 4 veces a Wilson, 2 de ellas de Epenesa, pero Allen lanzó para 177 yardas, con 15 pases completos de 26 lanzados, con 1 anotación y 2 intercepciones, liderando la liga con 11 pases interceptados y los locales pagaron caros sus errores de concentración y ejecución, provocándoles una dolorosa derrota.

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