
El Barcelona ganó su primera Liga con el nuevo formato de puntuación (3 puntos por victoria) sumando un total de 74 en la temporada 1997-98. Su entrenador era Louis van Gaal y celebró el título perdiendo 10 partidos en 38 jornadas.
Un año antes el Real Madrid de Fabio Capello había sido el campeón totalizando 92 puntos (aunque la Liga la jugaban 22 clubes para 42 jornadas). Eran tiempos, ya con 20 equipos, en que el trofeo casi se consideraba ganado superando los 80 puntos y que tuvo su récord en los 87 del Barça de Guardiola en 2009… Momento en que todo se disparó.
El Barça de Xavi (56 puntos en 21 jornadas) aspira a convertirse en el tercero en alcanzar los 100, un hecho logrado en dos ocasiones, y hasta romper esa marca, que comparte, desde 2013, con el propio Real Madrid. Disparado en la Liga, con 11 puntos de ventaja sobre el equipo merengue a falta de su partido frente al Elche, el conjunto azulgrana, que solo ha cedido dos empates y una derrota en 21 fechas, mantiene una velocidad de crucero que no se contemplaba desde la temporada 2014-15, cuando a estas alturas del torneo el Madrid era líder con 54 puntos, aunque tres derrotas y un empate en las siguientes seis jornadas lo descabalgaron en favor del Barça de Luis Enrique, finalmente campeón con 94 puntos.
“Me vale con ganar la Liga con setentaytantos puntos. Eso del récord está muy bien, pero lo principal es ser campeones, ese es el objetivo”, proclamó Xavi cuando acabada la primera vuelta con 50 puntos fue preguntado por la posibilidad de romper el récord de los 100 puntos, pero alrededor del Camp Nou se hacen ya cuentas y se entiende probable entrar en la historia del torneo con la mejor puntuación jamás obtenida.
El Barça rompió, de momento, su mejor marca invicta con Xavi en el banquillo alcanzando los 16 partidos (14 victorias y 2 empates) consecutivos sin conocer la derrota, que en la Liga son 11 encuentros (10 triunfos y 1 empate) desde que perdiera el 16 de octubre el Clásico del Bernabéu.
La solvencia azulgrana alcanzó un punto máximo en el campeonato de la regularidad, destacándose tanto una mejoría en el juego como, por encima de todo, una seguridad defensiva que lo convierte en el equipo menos goleado (apenas siete goles en contra), aunque su efectividad ante la portería contraria esté en cuestión. De sus 18 victorias, siete fueron por la mínima (1-0) y este es el resultado con el que ha superado cuatro de sus últimos seis encuentros.
Xavi, sumados 69 partidos desde que accedió al cargo en noviembre de 2021, ya es el sexto con mejor porcentaje de victorias (64 por ciento) entre los entrenadores que dirigieron al menos 65 partidos al Barça y el hambre con que se muestra su equipo en el terreno de juego provoca que el dilema del juego, siempre capital alrededor del club azulgrana, quede en un segundo plano cuando la conquista del título liguero está por encima de todo.
El líder no abandona su filosofía de ser protagonista con el balón, dominar los partidos y someter a los rivales, pero de forma excepcional no existe en el entorno la insistente exigencia de brillar, una circunstancia que históricamente estuvo ligada a los éxitos del Barça.
Hoy se trata de seguir ganando y sumar, mantener en la medida de lo posible el colchón de puntos sobre el Real Madrid y, por qué no, encaminarse a ese récord de los 100 puntos con que ganó el torneo en 2013 el equipo de Tito Vilanova para igualar el que una temporada antes había establecido el Madrid de Mourinho.
Este Barça persigue, en un reto secundario, una marca solo lograda dos veces pero que con el paso de los años ha dejado de ser un imposible, por cuanto entre 2010 y 2018 los títulos se celebraron con al menos 90 puntos. Lo que sí empieza a contemplarse es que después de que en las cuatro últimas temporadas los campeones (dos veces el Real Madrid y una Barça y Atlético) cerraran el campeonato por debajo de esos 90 puntos, ese guarismo volverá a ser superado.
El aumento de rendimiento de los clubes que han ocupado las primeras posiciones en la Liga queda de manifiesto recordando que los 69 puntos con que fue campeón el Deportivo de La Coruña en la temporada 1999-2000 apenas le habrían servido para ser quinto las tres últimas campañas, además de demostrar que la competencia entre Lionel Messi y Cristiano Ronaldo (llegado más tarde) fue providencial para catapultar el mando de los dos grandes entre 2005, tanto en títulos (con un absoluto dominio azulgrana 11-4) como en puntos.
Solo el Atlético de Madrid se coló desde 2004 (cuando fue campeón el Valencia) y hasta 2020… Sumando 90 puntos y en un recordado final de curso en que ganó el título en el propio Camp Nou, gracias a un polémico gol anulado por Mateu Lahoz a Messi.
Al Barça le quedan por delante 17 partidos (nueve en casa y ocho a domicilio) que significan 51 puntos. Sumarlos todos (lo que le dispararía hasta los 107) se contempla una misión imposible, pero atendiendo al calendario puede observarse que ya visitó prácticamente todos los campos más difíciles, con excepción de Athletic de Bilbao y el siempre impredecible derbi como visitante frente al Espanyol, con lo que lograr los 44 puntos que lo lleven hasta los 100 no es una quimera.