Los Georgia Bulldogs hicieron historia al vencer por paliza 65-7 a los Horned Frogs de TCU, coronando una temporada increíble y conviertiéndose en bicampeones de la NCAA, por primera vez bajo el actual formato del College Football Playoffs (desde 2014), y el primer equipo en repetir desde que Alabama lo hiciese en 2010 y 2011.
El partido inició igualado, pues Stetson Bennett IV corrió 21 yardas para abrir el marcador 7-0, luego los Bulldogs anotaron un gol de campo, sin embargo, Max Duggan acercó a TCU 10-7 con su propio acarreo anotador, antes que Bennett anotara su primer pase de anotación de la noche, y en segundo cuarto sucedería la debacle de TCU, cuando Duggan lanzó 2 intercepciones y 1 balón suelto, de la cual los de Georgia sacarían 21 puntos sin respuesta, con 2 anotaciones de Bennett.
Ya con el marcador 38-7, Bennett remató la faena ante unos Horned Frogs que bajaron los brazos, sumando otras 2 anotaciones antes de ser sustituido en el último cuarto, saliendo ovacionado en su último partido colegial. El equipo de Georgia sumó 2 anotaciones más para redondear la paliza, la mayor cantidad en la historia de un juego por el campeonato nacional.
Bennett, de 25 años, mayor edad que muchos profesionales incluso, llegó a Georgia sin beca, y pese a no tener las mayores aptitudes para un pasador al más alto nivel, por lo que posiblemente no sea tomado en el Draft, ha hecho historia al ser 2 veces campeón nacional y con su actuación de 304 yardas aéreas y 6 touchdowns totales se proclamó Jugador Más Valioso del partido por el Campeonato Nacional por segunda vez en su carrera, primero en hacerlo.
Kirby Smart, entrenador en jefe, sumó también su segundo campeonato en una temporada de ensueño que acabó invicto con marca de 14-0. Además, Javon Bullard, safety, fue el Jugador Más Valioso defensivo del juego y encabezó una defensiva temible hoy, como lo fue toda la temporada.
TCU, pese a caer estrepitosamente, tuvieron marca de 13-2, y pese a no estar clasificado antes de la temporada en el ránking de los 25 mejores, se metió al juego de campeonato, primer equipo en lograr dicha hazaña, y su figura principal, Max Duggan, pese a no jugar un buen juego sacó cara todo el año y podrá llegar a la NFL, probablemente como recluta de tercera ronda, en busca de una oportunidad profesional.
