Pocos en el mundo del béisbol se opondrían a la idea de que Clayton Kershaw será un Salón de la Fama en su primer año de votación. Pero en lo que a su legado en general se refiere, las cosas se ponen más complicadas cuando se toca el tema de su trayectoria en postemporada.
La historia general de Kershaw en los playoffs incluye aperturas estelares y fallas por igual – tomando en cuenta que varias de esas salidas fueron con poco descanso. La mayoría de las veces, lanzando lo suficientemente bien para mantener a los Dodgers en el juego. Y eso es lo que los Dodgers obtuvieron de Kershaw en su derrota por 5-3 ante los Padres en el Juego 2 de su Serie Divisional de la Liga Nacional la noche del miércoles en Dodger Stadium.
En ese mismo encuentro, Kershaw llegó a 213 ponches en postemporada, la mayor cantidad en la historia de la Liga Nacional y la Liga Americana. Sus seis ponches en el Juego 2 le permitieron tomar la ventaja y superar a Justin Verlander, quien lo había rebasado en la SDLA el martes.
Para concluir su labor monticular, el zurdo necesitó de 80 pitcheos (55 strikes) para retirar 5.0 entradas en las que permitió seis imparables y tres carreras.
