Los Bills de Búffalo arrancaron con buen pie la temporada de la NFL, pues le “abolló la corona” al campeón del más reciente Super Bowl, Rams de Los Ángeles, venciéndolos de manera contundente la noche de este jueves a domicilio 31 por 10.
El quarterback Josh Allen fue la figura del partido, completando 26 de 31 pases lanzados con 3 anotaciones, sumando además 56 yardas y 1 anotación por la vía terrestre, a pesar de haber lanzado 2 intercepciones.
Los Bills superaron en todo sentido a los Rams: en presión, ejecución e intensidad y a pesar de sus 4 pérdidas de balón, le infligieron la misma cantidad de pérdidas a sus rivales, además de tener 413 yardas totales en ofensiva por solo 243 admitidas y dejaron en solo 10 puntos a una poderosa ofensiva como la de los Rams.
También destacó la defensiva de los Bills, de la mano de su flamante fichaje Von Miller (ex de los Rams) quien tuvo 2 capturas y 3 tacleadas para pérdida de yardas, en conjunto la defensiva acosó y maltrató al QB de los Rams Matthew Stafford, quien con el nulo apoyo de su línea ofensiva fue capturado en 7 ocasiones además de sufrir 7 intercepciones.
Otros jugadores que destacaron por los Bills, fueron el receptor Stefon Diggs, con 8 recepciones para 122 yardas, incluyendo una anotación recibiendo un bombazo de 53 yardas, los alas defensivas A.J. Epenesa y Jordan Phillips, quienes sumaron 1.5 capturas cada uno. Además, Epenesa tuvo 4 golpes al QB.
Por los Rams destacó el receptor Cooper Kupp, con 13 recepciones para 128 yardas y una anotación, el tackle defensivo Aaron Donald con 2 tacleadas y 1 captura y el linebacker Bobby Wagner, quien en su debut con los angelinos tuvo 7 tacleadas (1 para pérdida), 1 captura y 1 golpe al mariscal.
