Se encendió la polémica en Los Angeles Angels, debido a que el dueño Arte Moreno anunció este martes (23 de agosto) que explorará la venta del equipo, a lo que el legendario bateador panameño Rod Carew respondió en su cuenta de Twitter “Bueno, estas son buenas noticias. Tengo renovadas esperanzas de que mi relación con la organización de los Angels pueda ser restaurada completamente”, a una publicación del reportero Sam Blum acerca de la posible venta del equipo.
Moreno compró en abril de 2003 la franquicia angelina, en ese momento campeones de la Serie Mundial, junto a la Compañía Walt Disney por 180 millones de dólares. Desde entonces en 20 campañas el equipo sólo ha llegado a postemporada en 6 ocasiones y a pesar de contar con jugadores laureados como Vladimir Guerrero, Josh Hamilton, Albert Pujols, Mike Trout, Anthony Rendón y Shohei Ohtani.
El equipo no ha podido llegar una Serie Mundial, y poseen un récord de 1561 victorias por 1478 derrotas (51.4% de victorias), pero se encaminan a su octava temporada seguida sin postemporada y séptima consecutiva con récord negativo.
Carew jugó siete temporadas con los Angelinos (en ese momento California Angels), en 834 juegos bateó .314, con 18 cuadrangulares, 282 remolcadas y 82 bases robadas, obtuvo 6 nombramientos al Juego de Estrellas.
Jugó desde 1978 hasta su retiro en 1985, donde consiguió la hazaña de conectar su hit 3000. Además fue coach de 1992 a 1999, en 1986 la franquicia retiró su número 29.
Carew asistió a juegos de los Angels en 2010 y 2017 pero parece que se encontraba descontento con la dirección de Moreno con el equipo, pues en enero dijo que “el liderazgo de los Angels no lo quería involucrado con el equipo”.
Se desconoce el origen de las diferencias entre Carew y Moreno, pero el panameño mencionó en entrevista con LA Times, que en 2000 visitó las instalaciones de Spring Trainning de los Mellizos de Minnesota (donde el panameño jugó la mayor parte de su carrera y destacó en sus mejores años), y el entonces manager angelino Mike Scioscia le hizo saber que no era bienvenido en las instalaciones de los Angels, pues debía estar con un equipo o con otro, aunque Rod dijo que solo quería ser ayuda a los jugadores jóvenes en aquel momento.
Luego de ese incidente Carew señaló que se le hizo difícil ir a los partidos y finalmente dejó de ir, asistiendo solo a los de los Mellizos.
